El derbi de San Pedro cayó del lado de un Villalonga que hizo de la practicidad virtud. En base a un planteamiento sobrio en lo defensivo, no exento de acertadas intervenciones de su portero, fue capaz de encontrar su momento para asestar dos golpes letales al Céltiga.

Fueron los de Javi Rey los que iniciaron mandando en el partido. El balón corría más por las botas de los de A Illa. Leandro tuvo el 0-1, pero su remate se encontró con la inspiración en portería de Aarón Puente. No se quedaron ahí la muestra de argumentos visitantes, pero volvió a desperdiciar poco después otra situación muy franca.

En el descanso, Ricardo Fernández retocó conceptos y el balón comenzó a durarle más a sus jugadores. Prácticamente en su primer acercamiento, Javi Vila sirvió un buen balón a la aparición en el primer palo de un David Calo que cruzó el balón con maestría a la red.

No dudó en replegarse el cuadro local ante un Céltiga que en ningún momento dio un paso atrás. La falta de espacios obligó a usar en exceso las acciones de centros laterales, pero la defensa celeste se mostró muy expeditiva impidiendo inquietar a su portero.

La puntilla llegó con un extraordinario tanto de David Campos de falta directa que se coló literalmente por toda la escuadra.