El Atlético de Madrid logró un triunfo por inercia, con un gol en propia puerta de Joaquín con el que derribó la resistencia del Valladolid, que clamó contra el VAR y la decisión del árbitro Melero López por un supuesto penalti por mano de Arias en los minutos finales y que chocó en tres ocasiones con Jan Oblak. La polémica está ahí, las paradas del portero también; todas claves en un encuentro que el equipo rojiblanco se tomó con relajación.

El partido fue una evidencia de la falta de motivación. No se exprimió jamás a lo largo de los 90 minutos, como si el triunfo fuera a llegar por la mera inercia de su superior nivel. Lo consiguió luego, ya avanzada la segunda mitad, porque apretó más, pero sobre todo porque tuvo suerte. La entrada de Saúl por la banda y su posterior centro no habrían sido nada relevante, sin el cabezazo hacia su portería de Joaquín.

Athletic-Alavés 1-1

El Athletic Club y el Deportivo Alavés alargaron con el empate a un gol en San Mamés su pelea por la séptima plaza. El choque se decidió al borde del descanso. eñat Etxebarria marcó un golazo a balón parado, en el minuto 41; y, al filo del 45, Borja Bastón igualó el duelo.