Unos días antes de que se cumplan cinco años de uno de los mejores momentos deportivos del Balonmano Nava, el equipo que actualmente dirige Dani Gordo puede lograr en el mismo escenario una de las mayores gestas del balonmano español: llevar a la gloria a una localidad que no llega a los 3.000 habitantes, situando al conjunto segoviano entre los 16 mejores equipos masculinos de balonmano del país.

Tras una temporada brillante, a pesar del varapalo que supuso la pérdida de su fichaje estrella, el gallego Adrián Rosales, en las primeras jornadas de liga, el líder sólido llega al tramo final de temporada con un colchón considerable: le basta un punto de los ocho que restan por disputarse para proclamarse campeón. Doscientos aficionados se desplazarán desde tierras castellanas para algo más que intentar cantar el alirón. En O Rosal se vivirá una gran jornada entre dos aficiones que se conocieron en Badajoz en 2010 -era el primer sector de ascenso a División de Honor Plata que jugaba el Viveros Herol- y se hermanaron en O Rosal en 2014.

Una gran fiesta del balonmano que comenzará al mediodía en una comida en el Restaurante Juan y que continuará en la "fanzone" prevista -si el tiempo acompaña- en las inmediaciones del pabellón rosaleiro, hasta las 19.00 horas. Será cuando suene el pitido inicial y cada aficionado defenderá a sus equipos, con necesidades bien dispares.

Si al Nava le llega un punto de aquí al final, el Acanor Novás necesita al menos cinco si quiere lograr el objetivo de la permanencia. Una empresa "difícil, pero no imposible", apunta Manu Martínez, el gran capitán, que confía en que los suyos pueden "puntuar en todos los partidos que restan. Aunque tres de los rivales que nos quedan son de la zona alta, y Zarautz en su casa es fuerte, hemos competido de tú a tú con todos y llegamos con muchas ganas y moral al tramo final".

El lateral izquierdo espera "un partido igualado y que se decidirá al final. Los dos equipos nos jugamos mucho y vamos a salir muy fuertes, sobre todo nosotros que jugamos en casa y tenemos menos margen de error que ellos". Cree que no es necesario, pero pide a la afición que forme "un auténtico infierno. Nos jugamos la vida y entre todos tenemos que ganar este partido".

Aunque será duda hasta última hora, en principio el técnico local, Isma Martínez, podrá contar con Carles Asensio, que recibía este lunes el resultado a la resonancia hecha la pasada semana y que descarta cualquier lesión grave. El pivote catalán sufre un golpe en la tibia, pero no tiene tocado ningún ligamento ni el menisco, lo que es una gran noticia para el equipo, ya que es un jugador básico en los planteamientos del cuerpo técnico. Con la excepción de Miguel Trigo, operado del labrum el pasado martes, y la duda de Asensio, el Novás tendrá disponible todo su arsenal.

Por parte del Balonmano Nava, serán dudas el lateral zurdo Alonso Moreno, el central defensivo Alvaro Rodrigues, el portero Yeray Lamariano y Paco Bernabéu, además de la baja confirmada de Adrián Rosales, operado a finales del año pasado de una rotura del ligamento cruzado anterior. Dani Gordo, que dirige por segunda temporada al conjunto navero, confía en recuperar a varios de esos hombres en una plantilla en la que destacan Agustín Casado y el incombustible Carlos Villagrán, uno de los supervivientes de 2014 junto a Bruno Virseda, o Darío Ajo.

El presidente del Acanor, Andrés Senra, cree que es un "partido especial, con sentimientos encontrados. El pabellón va a quedarse pequeño y la pena es que ambos nos juguemos tanto. Aunque deseo que asciendan a Asobal, trataremos de que canten el alirón la semana que viene. Ellos se juegan el ascenso, pero con un punto de aquí al final les llega. Nosotros necesitamos los dos para seguir vivos".