Pese a que supondría su exclusión de las competiciones europeas, los dirigentes del Real Madrid siguen planteándose la retirada del equipo de los torneos de la Asociación de Clubes de Baloncesto (ACNB), como respuesta al arbitraje de la final de la Copa del Rey y a lo que consideran explicaciones poco convincentes de la ACB. Según fuentes cercanas al club blanco, los servicios jurídicos madridistas están estudiando las posibles vías legales para llevar a la práctica su amenaza, lo que afectaría a la Liga Endesa, la Copa y la Supercopa.

El Real Madrid calificó de "lamentables" las explicaciones tanto de la ACB como de la Asociación de Árbitros Españoles de Baloncesto Asociados (AEBA) sobre el arbitraje y ha lamentado que el trío arbitral no haya querido "contemplar todas las imágenes que estaban a su disposición", por lo que seguirá "estudiando las medidas y actuaciones a adoptar" al respecto.

"El Real Madrid quiere manifestar que las explicaciones y valoraciones emitidas en ambos comunicados son lamentables, teniendo en cuenta la gravedad de lo sucedido", señala el comunicado emitido por la entidad blanca. Además, añade que aunque comprende "los errores humanos" que se puedan producir, lo ocurrido exige "una respuesta clara", todo después de que la jugada fuese revisada por el trío arbitral en el Instant Replay, y cuya decisión "sorprendentemente es contraria a lo que establece el reglamento, a pesar de la rotundidad de las imágenes televisivas a disposición de los árbitros y que todo el mundo ha podido ver".

Desde hace tiempo, el Madrid y otros clubes importantes de la Euroliga se plantean participar únicamente en el torneo continental. Según el artículo 5.3 de los estatutos de la Euroliga, uno de los requisitos para participar en el torneo es "la particicipación en el torneo doméstico".

Campazzo y Reyes

Según reflejaron los árbitros de la final en el acta, el base argentino del Real Madrid Facundo Campazzo se dirigió a ellos diciendo "ladrón" en tres ocasiones, mientras que Felipe Reyes, capitán del equipo, les dijo textualmente "esto es una puta vergüenza, un puto robo". En estas situaciones, los árbitros toman la decisión de retirar las licencias federativas de los jugadores a la espera de que se decida si se le sanciona con alguna multa económica o con uno o varios partidos de suspensión. Según diversas fuentes, como ha ocurrido en otras ocasiones lo más probable es que el castigo sea de carácter económico.