El Barcelona se mantiene invicto en LaLiga Santander tras golear este miércoles al Villarreal en un partido que resolvió, con goles de Coutinho, Paulinho y Messi, antes del descanso, y que Dembélé, en su mejor actuación como azulgrana, finiquitó en la recta final con un doblete.

Salió el Barcelona, en plena resaca del Clásico, con un equipo plagado de suplentes a un Camp Nou medio vacío. Y lo hizo recibiendo del Villarreal el pasillo de campeón que no le quiso hacer el Real Madrid. Los azulgranas ya han celebrado el doblete por las calles de la ciudad y los de Javier Calleja tienen prácticamente sellada su presencia en la Liga Europa la próxima temporada. Así que el duelo, convertido en un inoportuno partido aplazado disputado entre semana, podía parecer de lo más intrascendente.

No lo fue para el Barcelona, empeñado en pasar a la historia completando la Liga invicto, algo que no ha hecho jamás ningún club en el actual formato de veinte equipos. Los de Ernesto Valverde dejaron claro desde el principio que lo de no ceder ni un derrota en 38 jornadas se lo han tomado muy en serio. El equipo azulgrana mostró su versión más combinativa y autoritaria, aunque el Villarreal también tuvo sus momentos de dominio en la segunda parte.