El Barcelona anunció ayer que ha llegado a un acuerdo con el Gremio de Porto Alegre brasileño para suscribir una opción de compra sobre el jugador Arthur Henrique Ramos de Oliveira Melo, por el que el club catalán podrá ejercer la compra sobre los derechos federativos del jugador en julio de 2018. En el supuesto de que la entidad azulgrana ejerciera finalmente la opción firmada, el precio del traspaso queda fijado en 30 millones de euros más otros 9 millones en variables. Se trata en realidad, o ese aparente, de un fichaje consolidado pero vestido de esta manera mediante una fórmula técnica contable que conviene a los intereses azulgranas. De esta forma, el Barcelona podrá incluir la operación dentro del presupuesto de la temporada 2018-2019 para así tratar de cuadrar el límite salarial y cumplir con el juego limpio financiero que exige la UEFA.

Arthur (12 de agosto de 1996, Goiania, Brasil) es definido por los técnicos del Barça como un centrocampista "diestro y peligroso cerca del área", con más creatividad en la construcción del juego que desborde. Con el Gremio, en el que lleva cuatro años, ha ganado la Copa de Brasil y la Copa Libertadores. También ha jugado con la selección sub-17 y sub-20 de la canarinha y, a pesar de estar convocado en algunas ocasiones con la absoluta, todavía no ha debutado en un combinado donde están los azulgranas Paulinho y Philippe Coutinho.

El futuro de Neymar

El complicado futuro de Neymar. La eliminación del PSG a manos del Real Madrid en los octavos de final de la Liga de_Campeones ha desatado un torrente de informaciones sobre el futuro de Neymar en París. Todas coinciden en que el brasileño quiere dejar lo antes posible el equipo galo. Incluso hay quien apunta que Neymar, de baja los próximos meses tras haberse sometido a una operación en un dedo del pie, no querría volver a jugar con el PSG. El delantero brasileño estaría dispuesto a renunciar a las cantidades que le quedan por cobrar esta temporada en París -tiene contrato hasta el 2022- a cambio de que el club francés facilitaría su salida. De mano, el PSG ya ha puesto precio a su traspaso: 400 millones de euros. Y tampoco, según algunas informaciones, el club ya no tiene tan claro, como semanas atrás, que Neymar vaya a seguir. Prueba de ello es que el dueño del PSG, el jeque Nasser Ghanim Al-Khelaïfi, tiene previsto viajar a Brasil para intentar convencer a Neymar de que se quede en París.