El Baskonia ha sufrido para imponerse a un Monbus Obradoiro que ha rendido a un gran nivel y ha reforzado sus opciones de entrar en la Copa al obtener su sexta victoria en diez jornadas disputadas de la Liga Endesa.

El marcador se mantuvo parejo en un primer capítulo con alternativas hasta que el Baskonia, con un 14-16 en el minuto 8, dio el primer arreón gracias a la entrada de un Jayson Granger acertado en ataque.

El uruguayo, con una canasta de dos y dos tiros libres estableció un 21-16, pero Bendzius, con un palmeo a canasta en el último suspiro, apretó el electrónico al término del primer cuarto (21-18).

Movió el banquillo Pedro Martínez sin encontrar la fórmula para romper la solidez de un Monbus Obradoiro que se encontraba cómodo con el ritmo lento que imponía y, en el segundo cuarto, Pustovyi siguió haciendo de las suyas ante un adversario sin consistencia bajo los tableros.

Laksa se sumó con ocho puntos en este período al buen trabajo del pívot, que alcanzó los 14 tantos y tres rebotes, con 18 de valoración al descanso.

Metieron los azulgrana balones dentro y Poirier y Shengelia anotaron desde el tiro libre para poner un 50-44 en el minuto 23, pero el rocoso poste francés cometió su tercera falta.

Respondió pronto el cuadro gallego con un 0-7 (50-51) elevando también su intensidad atrás, lo que cortocircuitó el juego ofensivo local, y dominando el rebote en el aro rival ante la obligación de Pedro Martínez de proteger a un Poirier cargado de faltas.

Pero entonces encontró el Baskonia el acierto que le había faltado en el triple y, con la irrupción de Matt Janning -8 puntos en este asalto- y otra canasta desde los 6,75 de Shengelia equilibró de nuevo el duelo con un 60-59.

Huertas, con una bonita jugada personal y un contragolpe aumentó la renta local en el tramo final del tercer cuarto 66-61.

Ya en el último, el Baskonia, con un notable salida, completó un parcial de 6-0 y estableció un 72-61 en el minuto 33 que puso contra las cuerdas a un cuadro gallego que completó tres minutos sin anotar.

Pero Monbus Obradoiro no se rindió y reingresó de inmediato en el encuentro gracias un triple muy lejano de Sàbat y una discutible antideportiva de Malmanis.