Finalizar el año como número uno del mundo no es el objetivo de Rafael Nadal para este 2017, pero sí el fin al que conduce la suma de los objetivos del año: el ir sumando puntos torneo a torneo. Y así, en ese partido a partido, el balear está subiendo peldaños en una temporada en la que tritura récords tras haber alcanzado la décima victoria de su carrera en Montecarlo, Barcelona y Roland Garros. Lo que ningún jugador ha logrado en la historia del tenis -ganar diez veces un mismo torneo-, Nadal lo ha conseguido por triplicado.

Diez victorias para la historia en Roland Garros y la última, sublime, sin ceder un solo set, como ya hiciera en 2008 y 2010. Aquellos dos años llegó a situarse al frente de la clasificación mundial, como también lo hizo en 2013. Ahora busca un cuarto liderato. "Si sigo jugando bien, ¿por qué no? De aquí a final de año dependo de mí. Tengo una buena oportunidad de aspirar a algo muy bonito", señalaba en París.

Desde el 2 de febrero de 2004, cuando Federer sustituía a Roddick al frente del ranking de la ATP, el liderato mundial se lo han ido repartiendo los "cuatro tenores" del siglo XXI: 302 semanas del suizo (récord) al frente de la clasificación, 223 de Djokovic, 141 de Nadal y las 32 que suma ya Murray. El análisis de los datos apunta a que los días del británico como líder mundial están contados ante el acoso de Nadal. Cerró el manacorí 2016 en la novena plaza con 3.300 puntos y ahora, en el ecuador de la temporada, ya es segundo con 7.285. Entonces le separaban más de 9.000 puntos de Murray y ahora está a 2.605.

Nadal es el mejor tenista en lo que llevamos de año: 6.915 puntos sumados por los 4.045 de Federer, el segundo en la clasificación de estos cinco primeros meses; el único con cuatro torneos ganados y habiendo superado ya las cuarenta victorias -43- cuando sólo otros dos jugadores, el austríaco Thiem y el belga Goffin, tienen más de treinta en su haber. Y también es el que menos puntos defiende de aquí al final de campaña. En la recta final de 2016, y tras retirarse por lesión en Roland Garros, sólo ganó un título en el circuito profesional y fue en dobles, con Pablo Carreño en Beijing, además del oro olímpico en Río junto a Marc López.

En total, de aquí a final de año Nadal sólo defiende 370 puntos (90 en Cincinnati, 180 del Open USA, 90 de los individuales en Beijing y 10 en Shanghai) frente a los 7.960 de Murray, los 3.830 de Djokovic o los más de 3.000 de Wawrinka. Así, Nadal ya podría colocarse como número uno por cuarta vez en su carrera en el próximo Wimbledon, si bien sólo logrando el que sería su tercer título en Londres tendría asegurado el liderato mundial. El español ya ganó en el templo de la hierba en 2008 y 2010. También lo sería alcanzando la final, aunque no ganara, siempre y cuando el otro finalista no fuera Murray; o llegando a semifinales si el británico perdiera en primera o segunda ronda. En todo caso, el número uno es una carrera de fondo a lo largo del año y Nadal es, en estos momentos, el mejor atleta.

El segundo jugador del "top 10" que menos puntos defiende de aquí a final de año es Federer, con sólo 990. El suizo, vencedor en 2017 en Australia, Indian Wells y Miami, ha guardado fuerzas durante la gira europea en tierra batida para centrarse en sus dos grandes próximos objetivos: Wimbledon, donde el de Basilea buscará su octavo título, y el Abierto de Estados Unidos, torneo que ya ganó en cinco ocasiones. Su candidatura al número uno aparece tan firme como la del español.