El alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha asegurado este martes que la reforma de la grada de Río del estadio de Balaídos estará lista en agosto, cuando comience la próxima temporada, y que los trabajos comenzarán tan pronto la empresa entregue el plan de obra.
Ello a pesar de que el contrato de obras, que ha firmado hoy, tiene un plazo de ejecución de once meses e incluye la instalación de una nueva cubierta, el envolvente de la fachada y un acondicionamiento general del graderío.
El regidor ha reseñado que se intentará "evitar todas las incomodidades", aunque "las obras son obras", ha dicho, y ha garantizado que la grada de Río no se cerrará en ningún momento.
En este punto, ha explicado que a diferencia de la grada de Tribuna, en la que apareció "alguna dificultad de resistencia" de los pilotes de cemento, en Río ya se acometió un refuerzo de los contrafuertes, por lo que la resistencia a la hora de instalar la nueva cubierta "está asegurada".
Caballero ha recordado que el proyecto se adjudicó el 5 de diciembre y que, de no mediar el recurso de la asociación AdeVigo ante el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales, que acaba de rechazar de forma "contundente", se habría firmado apenas unos cinco días más tarde.
"Ese recurso nos birló dos meses de obras. Nos produjo serios inconvenientes", ha afirmado Caballero, quien ha instado a preguntar por el particular al vicepresidente de la Xunta y presidente del PP de Pontevedra, Alfonso Rueda, por la "enorme cercanía" de la asociación denunciante con su partido.
En cuanto a la reparación de los desperfectos causados por el temporal de viento, que obligó a la suspensión del Celta-Real Madrid, Caballero ha dicho que hoy se analizará el modo en que se acometerán los trabajos, y que aún están en la zona los bomberos.
Caballero ha garantizado que Balaídos estará "perfectamente preparado" y con "el 100% de seguridad" para recibir el próximo día 16 al Shakhtar Donetsk en partido de la Liga Europa.
