El acuerdo firmado con la multinacional japonesa Rakuten y la renovación del contrato con Nike acercan al Barcelona al objetivo de facturar en los próximos años mil millones de euros. En el último presupuesto aprobado, el club rozaba los 700 millones de euros anuales (695) y estos dos importantes impulsos le acercarán a su objetivo.

El acuerdo alcanza los 220 millones de euros por cuatro temporadas, pero si en este periodo el Barça consigue la Liga sumará un premio de 1,5 millones de euros más, así como cinco millones de euros por cada Liga de Campeones. El club podría llegar a ingresar un máximo de 246 millones. La relación con Nike, iniciada en 1998, expiraba en 2018 y se renueva hasta 2028. El Barcelona recibirá 105 millones de euros anuales fijos, que podrían ser 155 millones dependiendo de una serie de variables.

En la hoja de ruta de la entidad azulgrana, la cifra mil millones está redondeada en rojo. Necesita ese impulso para mantener una plantilla competitiva -que ahora se lleva en sueldos el 70 por ciento del presupuesto- y acometer el ambicioso plan urbanístico del Camp Nou.

Las negociaciones con la multinacional japonesa se abrieron en el verano de 2015 en el domicilio del presidente de Rakuten y a raíz de un contacto proporcionado por Gerard Piqué, quien mantiene una relación de amistad con Hiroshi Mikitani. Al margen de Rakuten, el Barcelona ha mantenido negociaciones con empresas como Amazon, Aliexpress y Huawei.

Bartomeu confirma: "Tenemos un plan estratégico para los próximos cinco años. Con el 'Espai Barça' cambiaremos las propiedades inmobiliarias del club y queremos llegar a facturar mil millones", ha dicho. "Vamos por el buen camino".