El ajustado empate cosechado el sábado ante el Betis en Balaídos no ha caído en saco roto. El punto sumado frente a los verdiblancos y la derrota del Málaga frente al Athletic en La Rosaleda han dejado al Celta muy cerca de la clasificación matemática para la Europa Liga, pese haber perdido la quinta plaza en beneficio del equipo vizcaíno.

El conjunto de Eduardo Berizzo es ahora sexto, con un punto de desventaja frente al equipo de Ernesto Valverde y cuatro sobre un Sevilla que ahora mismo parece más pendiente de conseguir una plaza en la Liga de Campeones ganando la Europa League que del puesto final que ocupará en la Liga.

En realidad, las consecuencias de la victoria obtenida ayer por el conjunto de Ernesto Valverde en La Rosaleda no han sido del todo desfavorables para el Celta, que puede sacar partido de la situación mañana mismo.

La derrota del Málaga ha dado al Celta un colchón de 12 puntos con respecto a la octava plaza, que ocupa precisamente el equipo andaluz y puede dejar al Celta a tiro de una sola victoria para conseguir, de forma matemática, el pasaporte para la Europa League.

A los de Berizzo les bastaría con ganar mañana su partido contra el Espanyol en Cornellà-el Prat y esperar que el Málaga no gane el miércoles en su campo a un Rayo Vallecano al que le va media vida en el envite. Si el Celta vence al Espanyol y el conjunto de Javi Gracia pierde o empata ante el Rayo en la Rosaleda, el Celta se aseguraría de forma matemática la octava participación de su historia en una competición continental. La distancia actual entre el equipo de Berizzo y el cuadro malacitano es de 12 puntos con cinco jornadas por disputarse. Si el Celta gana mañana al Espanyol y el Málaga no lo hace el miércoles ante los de Paco Jémez la ventaja celeste se ampliaría a 14 puntos con cuatro jornadas por disputarse, de modo que los andaluces nunca podrían alcanzar al conjunto celeste.

Tampoco podrían hacerlo el Eibar y la Real Sociedad, que tras la disputa de la trigésimo tercera jornada figuran en la novena y décima plaza, respectivamente, con los mismos puntos que el Málaga.

El factor diferencial entre los dos equipos vascos y el conjunto malagueño es el coeficiente de goles, favorable para los celestes con el equipo de Eusebio Sacristán y el de José Luis Mendilibar y desfavorable ante los de Javi Gracia tras su victoria por 2-0 en La Rosaleda, a la espera de que ambos equipos vuelvan a verse las caras en Balaídos en la penúltima jornada de Liga.

De este modo, si el Celta gana mañana al Espanyol en Cornellà-El Prat mantendrá como mínimo 12 puntos de ventaja frente al Eibar y la Real Sociedad con independencia del resultados que estos obtengan en sus respectivos enfrentamientos ante el Valencia y el Getafe. Incluso si los de Eusebio Sacristán y José Luis Mendilibar ganasen los últimos cuatro partidos y el Celta los perdiese, los de Berizzo harían valer su coeficiente de goles particular ante ambos equipos para deshacer el empate a su favor.

Tampoco un triple empate descabalgaría a los celestes de la séptima plaza, si ganan al Espanyol y no lo hace el Málaga. Los celestes han ganado sus dos enfrentamientos con la Real y ganado uno y empatado otro frente al Eibar, con lo que, en el improbable caso de que se diese un triple empate final, siempre saldrían beneficiados.

Claro que la intención del conjunto de Berizzo es pelear hasta el final por la quinta plaza y evitar, de este modo, la disputa de la fase previa, que en el caso del séptimo puede ser de hasta dos rondas.

Los resultados de la jornada dejan al cuadro vigués en buena disposición de recuperar el quinto puesto que ahora ocupa el Athletic con un punto más y el coeficiente de goles a su favor, a falta de que ambos vuelvan a enfrentarse en San Mámes en la antepenúltima jornada. La ventaja frente al Sevilla, que aún va a sufrir desgaste de una eliminatoria más de la Europa League (la semifinal ante el Shakhtar Donetsk) y tiene que recibir al Athletic en la última jornada, se mantiene en 4 puntos. El Sevilla visita el miércoles El Molinón y el Athletic recibe al Atlético de Madrid en San Mamés.