Nadar para perecer en la orilla. Eso es lo que le ocurrió ayer a un combativo Luceros que apretó al Calvo Xiria, pero que se quedó con la remontada a medias. La escuadra de Jose Figueroa comenzó bien, marcando diferencias y ahogando a su rival, que no marcó hasta el minuto 7. Y eso a pesar de que poco después Santi sufría su segunda exclusión y eso obligaba a los locales a variar su sistema defensivo. Los visitantes se fueron en el arranque del segundo tiempo y el Luceros tuvo un ataque para igualar a falta de 40 segundos, pero lo desaprovechó.