Las corazonadas de Iván Feijóo deberán tenerse en cuenta para siempre. Tras proclamarse subcampeón de España y campeón del trofeo de la regularidad en su primer año como júnior (cumple 17 en abril), el ciclista de Allariz acertó al verse en la convocatoria de la selección para el Mundial y clavó con asombrosa precisión su pronóstico sobre el resultado. Predijo que acabaría en el "top ten" en su debut si todo salía bien y cruzó la meta en la octava posición, tras 44 minutos y 39 segundos de carrera, a solo medio minuto del podio.

El holandés Jens Dekker (43.05) impuso su condición de favorito en la prueba celebrada ayer en Zolder (Bélgica) en una mañana fría y ventosa, con dos franceses, Bonnet y Crispin, a rebufo. Al ourensano se le quedó la séptima plaza a dos segundos tras una grandísima carrera en la que salía en el puesto 39. Con su potente pedalada y un ritmo sostenido, Feijóo se adaptó a la perfección a un circuito rápido y rebasó a una treintena de rivales.

El ourensano lograba el mejor resultado júnior del ciclocross español desde la medalla de plata de Gaizka Lejarreta en el Mundial de 1996, celebrado en París, como se apuntaba ayer desde la Federación Española de Ciclismo. En su portal web se recogieron también las declaraciones de Iván Feijóo tras su flamante octavo puesto. "Ha sido genial. La carrera fue muy dura desde el principio por culpa del mal tiempo. La clave ha estado en la salida ya que he salido muy bien, mejor de lo que pensaba. He comenzado a ir para adelante porque me he encontrado muy bien de fuerzas. He llegado a ir séptimo, pero tuve un enganchón, perdí dos plazas, pero pude volver a remontar. Estoy muy contento con la experiencia".

El 2015 fue un gran año para el alaricano, con el título logrado en la Copa de España júnior (hizo podio en seis de las siete pruebas) y su bautismo en la Copa del Mundo, logrando el 25º puesto en Namur. El subcampeonato nacional de Torrelavega confirmó su potencial en casa y, a pesar de que en el ensayo para el Mundial de hace apenas una semana en Hoogerheide entraba el 44º, con el octavo puesto de ayer el 2016 acaba de empezar y ya es memorable.

El precursor de Iván Feijóo en el escenario ciclista internacional, Pablo Rodríguez, cubrió de elogios la carrera de su amigo. El entrenamiento le impidió al de Maceda verla en directo. Lo hizo en diferido y vibró. "Es un puestazo. Un Mundial es especial, es la carrera del año, la que más preparan , y no solo es que hiciera octavo, que es un número brutal, sino que estuvo cerca de los primeros. Se ve que vale para esto", concluye entre risas.