El Celta se ha marcado como prioridad la cesión de David Costas a un conjunto de Segunda División A antes del cierre del mercado de invierno el próximo día 30 de enero. El joven defensa central tuvo un importante protagonismo durante la primera vuelta la pasada temporada con Luis Enrique, con quien llegó a jugar 17 partidos, pero no ha entrado en los planes del actual técnico, Eduardo Berizzo, que ha prescindido por completo de él en la Liga y apenas lo ha utilizado (en una posición no habitual) en un par de partidos de Copa del Rey.
En Plaza de España temen que la prolongada inactividad del jugador, que en marzo próximo cumplirá 20 años, frene su progresión y se le busca destino en un equipo de la categoría de plata -por contrato ya no puede volver al filial- en el que el internacional sub 21 celeste pueda recuperar la confianza en su juego y crecer futbolísticamente.
El club vigués cuenta con un par de opciones para buscar acomodo al chico, que la dirección deportiva que dirige Miguel Torrecilla tratará de concretar lo antes posible. La previsible marcha de David Costas no conllevaría el fichaje de otro defensa central.
En lo que se refiere a incorporaciones, el club intentará cerrar en este mercado invernal el fichaje de un medio centro que Berizzo ha definido como "mixto", esto es, un centrocampista de perfil similar al del danés Michael Krohn-Dehli, dinámico y versátil, capaz de jugar tanto de pivote como de interior.
Como en el caso de Theo Bongonda, el club celeste busca un centrocampista de futuro, aunque con mayor recorrido y experiencia que el delantero belga. La contratación del medio centro no es, sin embargo, una prioridad inmediata. Con la continuidad de Michael Krohn-Dehli en el aire, en Plaza de España piensan en un centrocampista que pueda sustituir al danés a partir de la próxima temporada, si finalmente decide, como parece, cambiar de aires.
Aunque las dificultades de retener a Krohn-Dehli son más que importantes y el centrocampista escandinavo es desde comienzos de este mes libre para negociar su futuro, en Plaza de España todavía no se le da por perdido.
