El Chelsea cayó ayer derrotado en Stamford Bridge ante el colista de la liga inglesa, el Sunderland, por 1-2, y se complicó sus opciones de disputarle la Premier al Liverpool, que hoy será líder con cinco puntos de ventaja si gana en su visita al Norwich. Borini sentenció de penalti, a ocho minutos del final, un duelo que Eto'o había puesto de cara para los "blues" en el minuto 12 pero que había quedado equilibrado poco después por Wickham.

A falta de tres jornadas que para que la Premier eche el cierre, la derrota deja al Chelsea con 75 puntos, dos menos que el Liverpool, con un partido menos y que recibirá a los "blues" el domingo 27 en Anfield.

"Sólo tengo cuatro cosas que decir", dijo Mourinho. "Felicidades a mis jugadores porque dieron lo que tienen y lo que no tienen. Felicidades al Sunderland, porque ha ganado. Felicidades a Mike Dean (árbitro) por su fantástica actuación y felicidades a Mike Riley (jefe de árbitros de la Premier) porque lo que ha hecho durante la temporada es fantástico para la forma en que se desarrolla el campeonato", afirmó. "Así que felicidades a todos ellos y yo no tengo nada más que decir", afirmó Mourinho, y no admitió preguntas. Su ayudante, Rui Faria, tuvo que ser sujetado por el propio Mourinho durante el partido, cuando se encaró con el árbitro.