Hay respeto hacia el Levante. El balón parado es una de las bazas del conjunto azulgrana. Para ello, Luis Enrique hizo hasta cuatro modificaciones con respecto a su último once. El asturiano varió la defensa y la sala de máquinas. Abrió las puertas de la titularidad a Íñigo López y Aurtenetxe mientras que le dio una nueva ubicación a Jony y a Fontás. El de Matamá volvería a su lugar de origen, el lateral derecho, mientras que el catalán regresaría al pívote defensivo. Los damnificados eran Borja Oubiña y, sorprendentemente, Hugo Mallo.

En la sala de máquinas había otra sorpresa. Luis Enrique le daba la oportunidad a Levy Madinda. Junto al gabonés estaría Augusto Fernández, suplente la pasada jornada. En ataque no hubo cambios. Charles fue el elegido para ocupar la referencia ofensiva, flanqueado en las bandas por Fabián Orellana y Nolito.

En el banquillo hasta cuatro titulares. Hugo Mallo, Álex López, Krohn-Dehli y Oubiña eran las opciones más serias para reforzar al equipo vigués en la segunda mitad. En este once, el Celta saltó al Ciutat de Valencia con tres canteranos (Yoel, Jony y Madinda), una cifra