El tenis español se ha convertido en una guerra civil de trincheras confusas conforme se aproximan las elecciones a la presidencia de la Federación, previstas para el 14 de marzo. El denostado Pedro Muñoz insiste en que no se presentará a la reelección, cosa que nadie acaba de creerse. Mientras, las federaciones promueven distintas alianzas y plataformas, sin que se conozca exactamente la composición de cada una. Galicia sí lo tiene claro: apuesta por los actuales mandatarios de Aragón y Valencia.

En teoría, catorce de las diecinueve federaciones territoriales de tenis se han unido para designar candidato. Asturias, Cantabria, País Vasco, Navarra, La Rioja, Cataluña, Madrid, Castilla-León, Castilla-La Mancha, Extremadura, Murcia, Andalucía, Canarias y Ceuta firmaron ayer un manifiesto en el que certifican que "ha llegado la hora de apartarle (a Pedro Muñoz) del timón del tenis español". Aseguran tener constancia de que el actual presidente de la Española ha realizado "incesantes y cada vez más evidentes movimientos para encontrar los apoyos suficientes que le permitan faltar a su compromiso" y presentarse a la reelección.

El madrileño Muñoz, caído en desgracia desde su enfrentamiento con las estrellas del equipo de la Copa Davis, jura que no ha hecho "ningún movimiento electoral" y revela: "He hablado con la mayor parte de los presidentes de las territoriales que se citan y ninguno se atribuye haber hecho frentes contra mí, ni tampoco han autorizado a que utilicen sus nombres para un comunicado y su remisión a la prensa".

Muñoz, según recoge EFE, asevera primero: "Vuelvo a reafirmar mi intención de no presentarme". Después añade: "Estoy a disposición del tenis español sin condiciones, si hace falta hacer frente a aquellos, pocos, que en nombre de muchos pretenden apoderarse del bienestar actual del tenis español con falsas maniobras".

Es una ambigüedad calculada, según el presidente de la Federación Gallega. Para Antonio Santorio, tanto Muñoz como los firmantes del manifiesto están maniobrando de forma torticera. "Yo no voy con esta gente (dice del grupo supuesto de las territoriales). No me parece serio lo que están haciendo. Galicia está con Aragón, Valencia, Murcia, Baleares, Castilla-La Mancha, parte de Cataluña y Madrid, con Andalucía por el medio". Hay elementos que coinciden en ambos colectivos, lo que Santorio explica por la nula representatividad de los conjurados de ayer. Pedro Muñoz, según la lectura del gallego, "estaría en medio, a su aire, esperando a ver si nos peleamos para aparecer como salvador de la patria. En caso de apoyar a alguien, nos apoyaría a nosotros. Pero no lo queremos".

La complejidad del proceso electoral explica este potaje indescifrable. En estos momentos técnicos y árbitros votan por correo a sus delegados; después lo harán personándose en Barcelona. Clubes y jugadores votarán en cada sede territorial (2 de febrero). De estas primarias saldrán 160 delegados. Junto a los 19 presidentes territoriales y el presidente de la Española compondrán la asamblea que decidirá el nombre del principal rector del tenis español durante los próximos cuatro años. Es prácticamente imposible precisar cuántos apoyos tiene cada uno cuando ni siquiera hay candidatos firmes. "Hace un mes se hablaba de siete. Ya ni se sabe", indica Santorio.

En su grupo, las opciones se limitan a dos de los presidentes asociados: José Senz (Aragón) o Miguel Monlló (Valencia). Santorio, que rechazó optar al cargo, los considera "personas muy válidas" y cree que "ganarán", aunque admite sobre el guirigay tenístico: "Es un conglomerado, un auténtico cirio".