Los administradores concursales del Celta celebraron ayer sus últimas reuniones con el fin de dar el toque final al informe que presentarán el lunes en el Juzgado de lo Mercantil Número 1 de Pontevedra y en que deben determinar el activo y el pasivo del club así como la cuantía y la naturaleza de los créditos pendientes.

El abogado Carlos Pérez Bouzada, el economista Francisco Prada y el inspector de Hacienda José González Vázquez han trabado durante cinco meses desde las mismas entrañas del club para conocer su estado real y la situación en relación con sus acreedores. Su informe se aguarda con verdadero interés porque cuestiones como la clasificación de la deuda son vitales de cara al futuro plan de viabilidad que el Celta quiere poner en marcha para evitar la liquidación de la sociedad y que pasa necesariamente por la llegada a un acuerdo con sus principales acreedores.

Una de las partes esenciales del informe será la opinión de los administradores sobre la viabilidad del club, cuestión sobre la que la jueza ha pedido que hagan una consideración. Aunque esta opinión no es determinante sí puede resultar esclarecedora sobre el futuro que le espera al club teniendo en cuenta que durante meses han seguido al detalle la vida financiera del club y han sido consultados casi a diario a la hora de tomar cualquier decisión que implicase un movimiento económico.

En el seno del Celta creen que el informe de los administradores apostará por la viabilidad del club porque creen que existe muchas posibilidades de que se alcance un acuerdo con los principales acreedores para garantizar su supervivencia. De todos modos, también existe la posibilidad de que en su dictamen los administradores condicionen ese futuro a que el Celta sea capaz de aumentar sus ingresos de forma inmediata lo que les obligaría a conseguir el ascenso de forma urgente para evitar que la situación se complique. En este sentido puede haber una pequeña diferencia con la opinión del club que cree que tienen hasta 2011 de plazo para volver a Primera. Los administradores puede que no vean un margen tan grande.

Por otra parte, en los últimos días se han multiplicado las reuniones entre el Celta con Caixanova, su principal acreedor, y en el club mantienen la confianza de que se pueda alcanzar un acuerdo, un optimismo que han manifestado sin rubor en Plaza de España cuando han tenido que pronunciarse sobre este tema.