Matías Lequi confía ciegamente en el Celta y le concede el cien por cien de posibilidades de salvar la categoría en las once jornadas que restan de Liga. Con "una pizca de suerte", el zaguero argentino se muestra convencido de que llegarán las victorias.

-El Celta es el peor de la Liga en lo que va de año. ¿Cómo lo explica tras un comienzo prometedor?

-El equipo no ha rendido lo que se esperaba y los resultados no han ido saliendo..., y hoy estamos hablando de la permanencia. La realidad es ésa, pero no hay una explicación matemática desde mi punto de vista.

-Sextos el curso pasado, cayeron en octavos de la UEFA... ¿El equipo está mentalizado para luchar por la permanencia?

-Yo creo que sí. Ha llegado un punto en el que nos hemos visto ahí abajo, y el objetivo y el hecho de jugar por algo cambió. En principio estábamos todos muy ilusionados con repetir en UEFA, pero cuando ves que los resultados no van saliendo se tiene que ser consciente, y que creo que lo somos, de que hasta final vamos a pelear por mantener la categoría. Y no tengo duda de que lo vamos a conseguir.

-¿Hubo en concreto algún partido que les alertó del peligro que corrían?

-No, no. Cuanto te metes ahí abajo la presión es doble porque te cuesta todo un poco más, siempre pasa algo. También nos falta esa pizca de fortuna para poder ganar.

-¿Qué tanto por ciento de posibilidades tiene el Celta de salvarse?

-El cien por cien. Si dijera menos sería no confiar en el equipo. No me cabe ninguna duda de que nos vamos a salvar. Hay calidad y moral suficiente para salir de este momento difícil.

-Pero pasan las semanas y los resultados no dan alegrías.

-Los resultados pueden que no den alegrías, pero las actuaciones del equipo no son malas. Siempre nos pasa algo, siempre hay ese pequeño margen que cambia los partidos: si no nos hacen un gol en fuera de juego, no nos pitan un penalti o nos expulsan a un jugador... Están pasando pequeñas cosas que con esa pizca de suerte y siguiendo la senda que llevamos el equipo tiene que ganar. Uno lo vive desde dentro y cree que el equipo tiene capacidad para ganar y para salir de ahí abajo.

-Balaídos es la asignatura pendiente. ¿Cómo se puede acabar con ese "miedo escénico"?

-Ganando. Sobre todo cuando marcamos, hay que tener tranquilidad. También creo que es un poco de nerviosismo, de presión nuestra, por lo que nos cuesta ganar en Balaídos. Cuando rompamos la racha, que creo que será al reiniciarse la Liga, va a cambiar.

-¿La visita del Real Madrid es una ocasión propicia?

-Da igual. Para nosotros a partir de ahora serán todos difíciles, como una final.

-Pero ante los grandes, el equipo parece más motivado.

-No más motivado, pero sí más tensionado. Pero somos conscientes de que nos quedan once finales.