"Este musical sirve para cargar las pilas y salir con muy buen rollo", asegura Christian Escuredo, el actor vigués que protagoniza el musical "Priscilla. Reina del desierto", que se estrena este jueves en el Auditorio Mar de Vigo a las 20.30 horas y que contará con dos funciones diarias de viernes a domingo.

Será la oportunidad de disfrutar de un espectáculo lleno de música y color, con una banda sonora reconocible para todos los públicos, que trata un tema de fondo de gran importancia: el respeto hacia el colectivo LGTBI. "La carga social es muy grande pero no solo por la homofobia sino por la discriminación y la falta de empatía, que es un problema con el que nos podemos encontrar siempre. 'Priscilla' tiene ese efecto, el de abrir mentes y corazones. Tenemos la oportunidad de mejorar una realidad, ya no digo cambiarla porque eso sería pretencioso, pero creo que mejorarla está en nuestra mano y creo que este musical lo hace. Pero el mensaje que mandamos no es para nada pretencioso, ante todo, la crítica ha calificado al musical como 'la fiesta de las fiestas", explicó el actor gallego, natural de O Barco de Valdeorras, que confesó ayer estar "nervioso por recibir a los paisanos" sobre el escenario en su estreno en el Mar de Vigo.

El musical cuenta la misma historia que la película de 1994, las aventuras de tres artistas drag que viven su personal periplo a través del desierto australiano a bordo del autobús que da nombre al espectáculo, el cuarto protagonista. Este montaje se estrenó en 2011 y desde entonces ha recorrido los principales teatros del mundo. En España ya han disfrutado de él 500.000 espectadores y Vigo será su única parada en Galicia, como destacó ayer el alcalde de la ciudad, Abel Caballero. "Tenemos que celebrar que vengan aquí y que lo hagan con un gallego al frente, un joven que está en la cumbre de su éxito, que se formó en Vigo como actor y que ahora regresa en la cumbre de su éxito", comentó el regidor.

"Es divertido, emocionante y espectacular". Así define Escuredo al musical que conlleva una complejidad técnica y logística de gran envergadura. Más de cuatro tráilers y casi 40 técnicos harán posible que el autobús de "Priscilla" y el desierto australiano lleguen al escenario vigués en perfectas condiciones.

Aparte de la música, la espectacularidad del escenario y las interpretaciones del elenco de actores y bailarines, el vestuario requiere en este espectáculo una mención especial. Más de 500 trajes, 200 pelucas y sombreros y una veintena de cambios sobre la marcha que coordinan distintos ayudantes. "Es realmente espectacular, yo tengo más de 24 cambios de ropa en las dos horas y media de función", apunta el gallego. Los trajes se basa en el de la película, que recibió un Óscar y un Tony al mejor vestuario. "Hay atuendos que solo podemos llevar puestos 15 minutos porque sino nos causarían lesiones", añade Escuredo, "pero hemos ensayado tanto que el espectador no percibe que nada de lo que llevamos pesa".