Todavía de noche, con las puertas de Peinador recién abiertas, el bus repleto de componentes de la banda de gaitas Xarabal y la Asociación Folclórica Lembranzas Galegas llegaba al aeropuerto. Por delante un largo viaje, de once horas en total. Les esperan Manhattan, la Quinta Avenida y el desfile de San Patricio, el jueves. La mayor parte apenas pisó la cama: "yo no pude dormir, al final"; "yo tampoco", "yo un par de horas", comentaban los más jóvenes.

Más de 50 pasaportes y tarjetas de embarque protagonizaron el inicio de la aventura musical americana. En las cintas de los mostradores de facturación llaman la atención los instrumentos de percusión, tan aparatosos y cuidadosamente protegidos para evitar golpes. Serán clave para aportar fuerza a las canciones que sonarán en la Gran Manzana. Saben que, si todo va bien, el madrugón para cruzar el charco valdrá la pena. Representarán a Galicia en el St Patricks Day de Nueva York. Para muchos gaiteros, un sueño.