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La rosa y el trigo dibujan la historia del Pazo de Mos

Plasman el paso del poder feudal al pueblo en un mural

La edil de Cultura y Turismo, Sara Cebreiro; el teniente de alcalde, Camilo Augusto; el presidente de la Fundación Pazo de Mos, Manuel Castro; la alcaldesa, Nidia Arévalo y la directora de Turismo de Galicia, Nava Castro, visitan el mural. // D.P.

La rosa de Mos, flor omnipresente en la heráldica local, y la espiga de trigo son los elementos protagonistas del mural que cubre el exterior del antiguo depósito de la depuradora inhabilitada de la granja de ganado vacuno y avícola preexistente y que ahora se encuentra integrado en el nuevo jardín del Pazo de Mos. Ambos fueron elegidos de manera conjunta por su promotor, la Comunidad de Montes Salgueirón de Mos, y su autora, la artista lucense Doa Oa (Doa Ocampo Álvarez). “Me propusieron trabajar con la rosa de Mos y el trigo, representado el paso del propio Pazo de Mos del poder feudal al pueblo y yo planteé la solución gráfica y cromática, intentando integrar en el espacio y en el paisaje, haciendo resaltar pero sin invadir demasiado, de ahí los colores, dentro de las tonalidades del contorno y en el catálogo de colores de paisajismo de Galicia de esa zona”, explica la artista, formada en Bellas Artes, que lleva casi una década pintando murales con el objetivo de hacer renacer espacios abandonados u olvidados con especies vegetales vinculadas a la zona y a sus habitantes. Con este son más de 30 las paredes decoradas, y precisamente este no es el primero en el Pazo de Mos, con anterioridad Doa Oa había pintado otros dos, más pequeños, en el interior de otra antigua depuradora.

La intervención de arte mural, cuyas dimensiones son 50 metros de largo por 3,5 de alto, “procura hacer un homenaje simbólico de historia del Pazo de Mos y de cómo a lo largo de los tiempos fue cambiando de propietarios hasta la actualidad, que es del pueblo de Mos”, señalan desde la Comunidad de Montes, poniendo de ejemplo la frase recogida en una viñeta de Daniel Castelao en la que habla de la abolición de foros, “As casas dos señores van ás mans dos labradores”. Indican que “la rosa de Mos y la espiga de trigo son símbolos del reflejo de una interpretación hecha de la lucha de los irmandiños” y que “en el subconsciente del escritor Manuel María podemos ver en su poema, hoy cantiga, “O pobo fixo novas sementeiras e xunto o trigo floreceu a rosa”.

Arte en el Camino

Para la elaboración de este mural la Comunidad de Montes Salgueirón de Mos recibió una subvención de 10.000 euros por parte de la Axencia de Turismo de Galicia, enmarca en la línea de ayudas para actuaciones de mejora paisajística y de embellecimiento de bienes y recursos que se encuentren en el Camino de Santiago, como es el caso del Pazo de Mos.

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