El Concello de Crecente ha recuperado la arquitectura tradicional de la fuente de Pazo do Casal y la del lavadero de Rastrada, con una ayuda autonómica de 30.000 euros, a través de la Axencia Turismo de Galicia.

Al lugar se desplazó el delegado territorial de la Xunta en Pontevedra, Luis López, y el alcalde de Creciente, Julio García-Luengo, para supervisar el remate de la doble actuación, que fue financiada por el Gobierno gallego dentro del programa de ayudas para la mejora de infraestructuras turísticas en municipios de hasta 10.000 habitantes.

En Pazo do Casal, se mejoró la estructura y se corrigió el deterioro y se eliminaron las filtraciones. Se recuperó, además, la estética de antaño y se mejoró el acceso. En el lavadero de Rastrada, situado en Quintela, se optó por suprimir el hormigón “para devolver el esplendor y la realización de otras mejoras”, explica la Xunta, entre otras actuaciones. Se construyeron pilares de piedra y se instaló una estructura en madera de pino gallego.