El Centro de Salud de Ponteareas, que da cobertura a un área poblacional de 23.000 personas, abrió el pasado martes con un solo médico de los 15 profesionales que tendrían que haber estado allí, según ha denunciado este viernes en un comunicado el sindicato de la CIG.

Desde la Gerencia del área sanitaria de Vigo, que el Sergas ha calificado esta situación de "puntual", y resolvió esta situación trasladando un facultativo desde Covelo y otro desde Mondariz, lo que en opinión del sindicato constituye "desvestir un santo para vestir otro".

El problema de la falta de facultativos, que impide cubrir ausencias imprevistas y vacaciones, es recurrente en casi todos los centros del área sanitaria y produce "situaciones inasumibles" en centros pequeños y rurales y, "de forma excepcional", en centros como el de Ponteareas, cuyos 23.000 habitantes siguen siendo demasiados incluso para tres médicos, apuntaron los representantes de los trabajadores.

Esta desproporción entre médicos y cupo de pacientes "obliga a que se priorice la asistencia urgente, relegando la prestación programada para enfermos crónicos a un segundo plano", según denunció el sindicato, que también subrayó que la preocupación por falta de asistencia también se extiende entre la población al ver que no hay continuidad en la cobertura de los cupos.

El sindicato aprovechó la ocasión para recordar que el año pasado ya denunció que el centro de Ponteareas tuvo que cerrar todas las agendas del 15 de agosto al 16 de septiembre y atender únicamente urgencias.

"Esta falta de cobertura, que se viene prolongando en el tempo, está llevando a todo el personal a una situación límite por la sobrecarga de trabajo", afirmaron desde la CIG, que exige al Sergas que tome "de una vez por todas" las medidas que permitan el normal funcionamiento del centro de salud.

Situación "puntual"

Por su parte, fuentes de la Dirección asistencial del área sanitaria de Vigo han trasladado a EFE que se trata de una situación "puntual" y lo achaca a "una concurrencia de varios factores: a las ausencias por permisos y vacaciones de los facultativos, imposibles de sustituir dada la carencia absoluta de médicos en las listas de contrataciones, a lo que se añadió una asistencias sobrevenidas y por tanto, imprevistas".

El Sergas señaló que la movilización de profesionales de otros centros de salud permitió valorar a cada uno de los usuarios que ese día se acercaron al centro y los médicos atendieron a los pacientes con problemas no "demorables", mientras que el resto fueron derivados a otros recursos sanitarios, tales como farmacéuticos, técnicos de salud y profesionales jubilados colaboradores, sin que el Sergas tenga constancia de ninguna "incidencia significativa".

El Sergas añade que la situación fue revertida al día siguiente, con la incorporación de médicos ausentes y con la contratación de otros facultativos del área que quedaron disponibles en esa fecha.