Tras someterse a las reparaciones que marca el protocolo durante seis semanas en el astillero Montenegro de Vigo, la réplica de “La Pinta” regresó ayer a Baiona. Cinco años después de la última varada, la embarcación construida hace 29 años se sometió a una limpieza integral y se pintó al completo. Se renovó toda la cabuyería, las poleas, bigotas, patecas, jarcias y se colocaron más de 40 motones nuevos. También se han realizado mejoras en los mástiles y en alumbrado de cubierta.