Hace décadas que los sucesivos gobiernos municipales de Gondomar han tratado de llevar a cabo un paseo fluvial en torno al río Miñor, un proyecto que figura en prácticamente todos los programas electorales de todos los partidos que se han presentado a las elecciones municipales. Ahora surge un nuevo intento. El Concello ha encargado la redacción de un proyecto para trazar una senda verde de algo más de un kilómetro, desde el centro urbano hasta el puente medieval de Mañufe. Un espacio de ocio que incluirá una pequeña playa fluvial y una zona de descanso con bancos y césped para echarse al sol o a la sombra junto al cauce que vertebra la comarca. Así lo confirma el alcalde, Paco Ferreira.
El proyecto aprovechará los tramos que se han creado sobre el colector que lleva las aguas fecales a la Estación Depuradora de Augas Residuais EDAR, así como los abiertos al paso de numerosos vecinos que ya caminan por el entorno con frecuencia. Será, señala el regidor, una senda “natural y poco agresiva” con el entorno. Medirá 3,20 metros de ancho y será de tierra compactada, con alumbrado tenue a pie de suelo “para minimizar la contaminación lumínica y respetar las especies que habitan el entorno del río”, apunta Ferreira.
La senda medirá 3,20 metros de ancho y será de tierra compactada, con iluminación tenue a ras de suelo
El paseo partirá del entorno del parque lúdico-canino y, a unos metros río abajo, está previsto convertir la parcela pública que alberga la antigua depuradora gondomareña en espacio público de recreo. Será en ese punto donde Ferreira plantea adecentar la ribera a modo de pequeña playa para evitar a los vecinos los viajes a Baiona y a Nigrán para darse un baño, además de habilitar un área de descanso para colocar la toalla en el suelo o merendar en los bancos.
El sendero cuenta, señala el alcalde, con la autorización de Augas de Galicia, que exige el uso de materiales que las crecidas no puedan arrastrar hacia el lecho del Miñor. En ese sentido, el proyecto incluye técnicas de bioingeniería para proteger los márgenes, además de accesos directos al caudal y paneles informativos y códigos QR con datos sobre todo lo que los viandantes se encuentren en el camino.
Expropiaciones
Falta la cesión de terrenos por parte de los propietarios, con los que el gobierno municipal ya ha empezado a contactar.
No hay fecha por el momento para llevar a cabo las obras. El gobierno municipal quiere disponer de un diseño cerrado para presentarlo a la próxima convocatoria de fondos europeos de recuperación de la crisis sanitaria, asegura el regidor.
Una piscina en proyecto en As Ánimas
Entre los planes del gobierno municipal para los próximos años se encuentra también la creación de una piscina pública o playa fluvial en las inmediaciones del nuevo centro de salud, en la zona de As Ánimas. La idea todavía “está verde”, apunta Paco Ferreira, que espera abordarla pronto con Augas de Galicia, aunque se muestra pesimista porque “son reticentes a este tipo de actuaciones”, máxime en una zona inundable como es la elegida. De todos modos, probará suerte porque considera que sería un servicio “muy útil y cómodo para decenas de familias que cuando llega el verano se ven obligadas a coger el coche para llevar a los niños a la playa a Nigrán o a Baiona”. Si el departamento autonómico da luz verde a la iniciativa, habrá que estudiar los costes para determinar si es viable, añade Ferreira.
