La mejora del servicio de emergencias de Ponteareas, del que se beneficia toda la comarca, difícilmente podrá llevarse a cabo, al no asumir la Diputación de Pontevedra su parte económica en paralelo a la nueva inversión que realizará la Xunta de Galicia.
Los diputados provinciales del PP en el organismo provincial anunciaron ayer que presentarán alegaciones al presupuesto provincial para permitir la inversión que mejora la renovación de los convenios de los efectivos de seguridad en diferentes concellos que no tienen recursos para afrontar esa competencia. En el conjunto de Galicia solo la diputación de Ourense, gobernada por el PP, accedió a la mejora de la propuesta, mientras que A Coruña, Ourense y Pontevedra, donde el PSOE lidera, no consta que accedan a la renovación.
La propuesta para Ponteareas establecía una partida de 310.000 euros a compartir entre Xunta y Diputación, pero todo apunta a que continuará con 155.000
La propuesta para Ponteareas, según el acuerdo de la comisión de seguimiento, establecía una partida de 310.000 euros, a compartir entre Xunta y Diputación. La propia alcaldesa, Cristina Fernández Davila (BNG) calificó en el mes de octubre de importante el incremento pero advirtió que “la subida será insuficiente para cubrir la totalidad de los costes” e incluso solicitó que se revise e incremente la partida.
Pero la falta de acuerdo en el mejor de los casos dejará a Ponteareas con la misma cantidad que recibía hasta ahora (155.000 euros) ya que la Xunta condiciona su aportación a que también las diputaciones incrementen la suya.
El portavoz del PP en el ente provincial pontevedrés, Jorge Cubela, recordó ayer que no hay dudas de que las emergencias son una competencia de las diputaciones provinciales y pide al gobierno provincial de Carmela Silva “que cumpla con sus competencias, apoye a los pequeños y medianos ayuntamientos de esta provincia y reserve dinero en los presupuestos para los servicios de emergencia”.
Pero la situación puede ser aún más complicada, las tres diputaciones socialistas abandonaron en noviembre la reunión de la comisión de los Grupos de Emergencias Supramunicipales (GES) sin llegar a un acuerdo y antes de la votación para conocer el posicionamiento de cada una de ellas, es decir, si aceptaban las mejoras propuestas por el gobierno gallego, si optaban por renovar sin ellas o si ya no tenían interés en renovar el convenio actual.
