Tomiño ha generado en lo que va de año 135 toneladas de biorresiduos en sus 16 centros de compostaje comunitario repartidos en los núcleos urbanos de las parroquias de Tomiño y Goián, de las que 29 finalizaron en forma de compost para entregar a los vecinos y utilizar en los parques, jardines y huertas escolares del municipio. La concejala de Medio Ambiente, Ana Belén Casaleiro, destaca esa cifra “como una muestra más de nuestro compromiso con nuestro medio natural y con un mundo más sostenible”, al tiempo que anima a los vecinos a rentabilizar los residuos de sus hogares, es decir, “transformar el residuo en un recurso".

También se llevó a cabo un cribado de parte de los biorresiduos para obtener un material más fino que se encuentra almacenado en cajones, instalados en alguno de los centros de compostaje comunitarios. Hay que resaltar además que el compost generado por el colegio Pedro Caselles Beltrán está siendo utilizado en la huerta del propio centro educativo, la cual es gestionada por los niños de la propia escuela.

La concejala de Medio Ambiente quiere recordar que los vecinos de los edificios de los núcleos de Seixo y Goián que el Concello tienen a su disposición calderas para facilitar la separación en la vivienda. Hasta ahora se repartieron el 30% de ellos para el uso en los centros de compostaje, y la edil anima “al resto de los vecinos que no tengan uno, a solicitarlo para echar sus biorresiduos de la cocina y depositarlos en el centro de compostaje más próximo a su vivienda”.