En todos los rincones del municipio de Tui crecieron calabazas, grandes y pequeñas. Algunas con una circunferencia de hasta 3 metros, otras minúsculas, pero en cantidad suficiente para cargar decenas de tractores. No surgieron de forma espontánea o “ventureira” , como se llama a la hortalizas que nacen sin que nadie las siembre; se trata de un curioso movimiento vecinal para inundar de calabazas la Praza da Corredoira los dos últimos días de octubre, cuando el tiempo huela intensamente a Samaín.
Ayer fue presentada la iniciativa, con el impulso y la fuerza vecinal, y la afanosa ayuda del Concello a través del alcalde, Enrique Cabaleiro, y la concejala de Comercio, Ana Núñez, que puso su eficiencia al servicio del proyecto. La edil dejó claro que el ayuntamiento “tenía” que participar en la iniciativa “porque la calabaza es un valor que se identifica con la historia del comercio de Tui y que tuvo un gran peso en la ciudad”, indicó.
Los dos últimos días puede haber hasta 10.000 calabazas o calacús o cocos, como se le quiera llamar, juntos en Tui. Explicó uno de los organizadores, Juan Carlos Boo, que “todo empezó en Eido do Pancho, en Randufe, hace tres años”. Y añade que “la gente acogió muy bien la idea porque la calabaza es algo nuestro, con muy poco trabajo y muy vistoso, que se deja querer, y tiene muchos aprovechamientos”. Participan vecinos y vecinas particulares que se dan consejos o se intercambian semillas, pero sobre todo centros culturales y asociaciones, sin los que, enfatizan, no podría organizarse. Añaden que Carlos Picho, que es otro vecino, algo así como el príncipe de la calabaza de Tui, hasta pidió prestadas fincas para plantar. “Creo que vamos hacer historia en calabazas”, destaca Boo.
La feria ocupará la Praza da Corredoira el último fin de semana de octubre
En el acto de presentación, adornado, como no podía ser de otra forma, con calabazas, que no pasaron inadvertidas para los turistas, también habló la concejala de Cultura, Sonsoles Vicente, y el regidor apuntó que la propuesta era interesante “y ante una iniciativa como esta, nuestro deber es estar al lado de la gente”.
La feria partió de los vecinos Telmo Alfaya y Carlos. Según explicó Ana Núñez, después de un mes con exposiciones en las parroquias, el broche final será en el centro de la ciudad con un fin de semana, sábado 30 y domingo 31, de 11.00 a 20.00 horas, donde la calabaza será protagonista para exhibición y venta. “Además la restauración local ofrecerá platos y dulces elaborados con calabazas. Habrá talleres, show cooking con calabazas, con Iván Méndez o Alejandro Iglesias (dentro del proyecto de cooperación Euro-Chef que promueve la Asociación de Desarrollo Galicia Sureste Eu Rural). También estará Miguel Rodríguez, jefe de cocina de los paradores de Baiona y Tui, entre otros profesionales. Además, habrá obradoiros y talleres de decoración de calabazas para niños y mayores, concurso y espectáculos musicales”, apunta la edil.
En una cuidada organización, donde el Club AndaTui, reliza visitas guiadas a pozas, regadíos y acequias, los actos inaugurales serán este sábado y domingo, con un recorrido en tren turístico por todas las parroquias, y paradas en los centros culturales, donde se abrirán las exposiciones iniciales, una en cada parroquia. También ahí habrá actividades “porque queremos dar vida y visualización al rural”, apuntan.
