El confinamiento hizo estragos en la actividad deportiva y la piscina mancomunada de A Ramallosa perdió la mitad de sus más de 4.000 abonados durante el encierro. Un año y medio después, el centro deportivo ha recuperado el 75% y se sitúa ya por encima de los 3.000, pero pretende volver a la normalidad cuanto antes. Para ello, aprovecha la vuelta a la rutina tras las vacaciones para lanzar una campaña de reactivación para “todas esas personas que practicaban deporte pero que lo dejaron”, explica el director, Roberto Cancelas.

Para facilitar las inscripciones, no cobra la matrícula a lo largo de septiembre, regala un mes de abono individual, ofrece la integración gratuita de los hijos en el abono familiar y sortea seis meses gratis de gimnasio.

La parrilla de actividades se ha reforzado, igual que los servicios complementarios como la escuela de natación o la sauna y el baño de vapor.