El número de familias de O Morrazo –contando los municipios de Bueu, Cangas, Marín y Moaña– ha descendido en 224 unidades entre 2010 y 2020, según el estudio sobre hogares que acaba de hacer público el Instituto Galego de Estatística (IGE). Sin embargo, en esta misma década se registró un gran incremento en las familias que pasaron de residir en un piso de un edificio con más de una vivienda a vivir en una casa unifamiliar. En total son ahora 20.594 las familias que viven en una casa individual, lo que supone 2.718 más que al comienzo de la década y representan un 66,87 por ciento del total de familias censadas en la zona: 30.800.
En el año 2010 solo el 57,67% de las familias morracenses se podían permitir vivir en una casa unifamiliar. En un piso viven ahora mismo 10.205 unidades familiares de la comarca, 2.942 menos que hace un año. Todo apunta a que la pandemia del último año estimuló más el interés de los propietarios por buscar casas con jardín ante el temor de nuevos confinamientos, toda vez que lo vivido en la primavera de 2020 fue infinitamente más duro para aquellos que debieron soportar el encierro en un piso.
A nivel gallego también se registró un incremento de familias que se trasladaron a casa en la última década, pero mucho más tímido que en O Morrazo. Son ahora un 49,14 los ciudadanos de la comunidad que viven en una vivienda única, totalizando 525.0509 familias. Hasta 543.366 unidades familiares gallegas viven en pisos, dentro de inmuebles compartidos con otros propietarios.
En cuanto al tamaño medio de la vivienda de O Morrazo, también ha crecido significativamente en la última década. Así, mientras en 2010 un total de 15.241 familias vivían en casas de menos de 90 metros cuadrados, ahora hacen lo propio 4.338 familias menos, representando solo un 35,40% del total.
Por su parte, son 13.072 las familias que residen en una vivienda de entre 90 y 120 metros cuadrados, un 42,44% de todos los hogares de la comarca. Los que se pueden permitir una casa de más de 120 metros cuadrados son apenas un 22,16% de las familias morracenses, pero sin embargo la cifra se duplicó en la última década y ya suponen un total de 6.826 las familias que residen en una vivienda de gran tamaño. En cuanto a los equipamientos de las viviendas, un 43,37% de los vecinos de O Morrazo dispone de un jardín privado y solo un 1,62% cuenta con un jardín comunitario. La conexión a la red pública de agua potable solo alcanza todavía al 74% de los hogares, abasteciéndose el resto de pozos privados o traídas comunales.
Otro dato que sorprende de la encuesta estructural de hogares del IGE es que el coste de la vivienda supone cada vez menos carga para los morracenses. En 2010, en plena crisis económica, el 45,49% de las familias consideraban que pagar su vivienda suponía “una carga pesada” cada mes. Ahora los que se enfrentan a la misma situación solo suponen un 19,31%. Por su parte, aquellos que consideran el pago de su casa “una carga razonable” subieron del 54 al 89% de las familias.
