Olegario Giménez, el que fuera rey de los gitanos de Galicia, falleció esta noche a los 71 años en un hospital de Vigo tras llevar tiempo sufriendo problemas de salud. En las próximas horas su cuerpo será trasladado a su Tomiño natal, donde será velado por su familia. La Guardia Civil y la Policía Local de Tomiño ya están preparando un dispositivo para evitar posibles problemas en el velatorio, al que se espera acudan decenas de personas.

Uno de sus hijos, Sinaí Giménez, ocupa el trono de los gitanos de Galicia después de que en 2019 obtuviese el visto bueno del consejo de ancianos en el que estaba integrado Olegario. El rey de los gitanos en Galicia, un cargo que se considera de una gran importancia en el que, entre otros, se resuelven y se llevan a cabo acciones de ayuda y apoyo para resolver conflictos dentro de la Comunidad Gitana. Olegario estuvo más de veinte años ejerciendo como rey de los gitanos tras la muerte de su padre Juan. Su hijo tomó el relevo.

Durante años trabajó como capataz en el puerto de Vigo, con más de 200 personas a sus órdenes, la mayoría gitanos. Y al frente del clan Olegario movió los hilos de la venta ambulante de ropa en la zona y copó ferias y mercados.