El cumplimiento de las medidas de prevención del Covid-19 preocupa al personal del centro de salud de Tui, que en las últimas semanas ha notado varias conductas incívicas. La primera de ellas es la ausencia del uso de mascarilla en una parte de la población, y la segunda, la impaciencia de los usuarios a la hora de respetar los protocolos de regularización de entrada de pacientes al ambulatorio. Esta ya ha derivado en alguna actitud violenta y proliferación de insultos. Por ello, ante el "desamparo" que perciben de la Xunta, han solicitado refuerzo policial al Concello de Tui.
Debido a las medidas de seguridad para evitar los contagios por coronavirus, el Sergas ha limitado el aforo de los centros de salud, lo que está provocando que, según fuentes del mismo, "la gente se está poniendo violenta e incluso ha habido que llamar a la Guardia Civil en alguna ocasión".
Personal del centro de salud ha requerido ayuda al Concello y, aunque desde la administración tudense recuerdan que es responsabilidad de la Xunta velar por la seguridad de sus trabajadores, ya se ha comenzado a reforzar la zona. "Mandamos a la Policía Local, sobre todo a primera hora de la mañana, puntalmente y cuando tenemos medios, porque tampoco es que estemos muy sobrados", explica el alcalde, Enrique Cabaleiro.
También comenta el regidor tudense que a menudo recibe quejas de los vecinos por la falta de personal en el centro de salud y porque la atención telefónica está generando disfunciones en cuanto a la medicación que les recetan. Por todo ello, desde el Concello ya han enviado un par de escritos a la Xunta pidiendo que resuelvan la situación pues, "aunque son momentos complicados", "si hay motivos para convocar elecciones, también los habrá para normalizar de una vez por todas el servicio de salud", dice el alcalde.
En cuanto al uso de mascarillas, el Concello ya emitió a principios de esta semana un comunicado haciendo un llamamiento a la responsabilidad individual en el cumplimiento de las normas sanitarias de prevención del Covid-19. También se le ha dado orden a la Policía Local para que advierta a los vecinos que no lleven la mascarilla o que no guarden las distancias de seguridad en determinadas situaciones. Todavía no se ha multado a nadie, pero, transcurrida una semana, si las conductas irregulares se repiten, empezarán las sanciones.
"Me preocupa sobre todo la concentración de gente joven que no guarda ningún tipo de medida sanitaria", destaca Cabaleiro, que, en ese caso, ha pedido inflexibilidad a la Policía Local a la hora de imponer sanciones. "Son mayoritariamente menores de edad y los padres tienen que saber que la responsabilidad de los actos de sus hijos menores la van a pagar ellos", advierte el alcalde.
