El alcalde no ha cambiado de opinión y, según indicó ayer, hoy mismo se reunirá con la directiva de Castro e Ladeira para repetirles que "teñen que irse xa", como ya hizo el otro colectivo que tenía su sede en el mismo bajo del edificio, la asociación Encaixamos Val Miñor de personas con discapacidad. "Non temos máis espacios públicos que o Ángel Bedriñana", recalca.
El regidor asegura que la entidad no puede utilizar la "casa rosa" porque existe una ordenanza que lo impide y "habería que modificala ou derogala", con la tramitación que ello conlleva. Rechaza de plano que el Concello alquile un bajo como propone la entidad por falta de recursos y recuerda a los directivos de Castro e Ladeira que "estiveron durante anos ocupando un espazo que non era deles sen pagar nada" .
