La situación de desbordamiento en la que se encuentran los Juzgados de Redondela, un problema que llevan denunciando los sindicatos desde hace años, podría lograr una solución a corto plazo. Así se desprende de la visita ayer del director xeral de Xustiza, Juan José Martín, a las dependencias judiciales redondelanas, donde confirmó que este problema será analizado a finales de este mes por una comisión mixta en la que participará el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) y la Xunta en la que se decidirá si se dota de más personal a estos juzgados ante la elevada carga de trabajo que soporta.
Martín reconoció que Redondela precisaba de "un refuerzo puntual", aunque trasladó a esa comisión la responsabilidad de tomar la decisión definitiva.
El director xeral también se refirió a otro de los problemas que afectan al Juzgado número 2, que asume las competencias de violencia sobre la mujer, ya que carece de una sala adecuada por lo que obliga a las víctimas a compartir un espacio de pequeñas dimensiones sin apenas intimidad, ni siquiera para ser asesoradas por sus letrados. Además los testigos carecen de un lugar específico donde estar, por lo que es fácil que se encuentren con algunas de las partes, cuando no deberían tener ningún contacto con éstas para evitar la contaminación de sus declaraciones y, en algunos casos, garantizar su propia integridad. Sobre este asunto apuntó a una "reorganización" de los espacios disponibles.
Durante su visita a las dependencias redondelanas, Juan José Martín conoció las mejoras acometidas por la Xunta para reforzar la seguridad del edificio. Así, se instaló un nuevo sistema CCTV, dotado de quince cámaras (ocho interiores y siete exteriores), un monitor de 24 pulgadas, un grabador, dos discos duros, dos SAI y todo el equipamiento necesario para que funcione correctamente.
La Xunta está trabajando en la mejora de los recursos a disposición de la Administración de Xustiza de Galicia, a través de un ambicioso Plan de Infraestruturas Xudiciais aprobado en 2010 por el gobierno gallego para llevar a cabo tanto grandes proyectos como otras obras de menor magnitud, pero igualmente relevantes para mejorar las instalaciones.
Una de las medidas incluidas aborda la puesta en marcha de un proyecto de mejora de la seguridad pasiva de las instalaciones mediante la incorporación de sistemas de cámaras de vigilancia y de escáneres y arcos detectores de metales, actuaciones como las llevadas a cabo en los juzgados de Redondela.
La Xunta también cuenta con un proyecto de renovación del mobiliario de las oficinas y archivos en los edificios judiciales de las siete ciudades.
