Hace ocho años que la comunidad de montes de Oia tiene en mente este proyecto que, en palabras de su presidente es "transformador" y supone "a obra máis importante do municipio nos últimos corenta anos". Pero se ha encontrado trabas administrativas, desde la ausencia de ayudas solicitadas a la Xunta al retraso de la licencia municipal, solicitada hace tres años y aún pendiente. Rodríguez, que desde hace un mes también es concejal por el BNG en la Corporación, lamenta la falta de apoyo institucional. "Nós estamos recuperando o patrimonio por amor á arte e a Administración está deixando que caia, como ocorre co mosteiro", afirma. Los comuneros reclaman al Ayuntamiento que agilice el trámite para avanzar y advierten de que "isto vai ir adiante a pesares dos atrancos". De momento, se han visto obligados a realizar trabajos de consolidación "para que non caeran as paredes", pero la reforma espera el permiso y la comunidad espera finalizarla en dos años.
