Una ballena de 19,5 metros de largo y presumiblemente cerca de 30 toneladas de peso quedó varada ayer a las 15:30 horas en las rocas de O Porto do Costado, entre los concellos de Oia y O Rosal. Es el segundo animal de estas características encontrado muerto en aguas gallegas en 24 horas, el anterior fue localizado por dos pescadores en la zona de Bueu, el jueves.

El gran cetáceo fue avistado por un vecino desde su casa, flotando en aguas cercanas a la costa y avisó al 112 Galicia que comunicó los hechos a Protección Civil de O Rosal y Oia.

El jefe de la unidad y el vecino comprobaron como la ballena varaba finalmente en las rocas de O Porto do Costado, exactamente a las 15:30 de ayer viernes. "Se da la circunstancia que estaba la marea baja, y el animal quedó varado en las roca, aunque no sabemos si permanecerá allí este sábado pues, puede ser llevado de nuevo por las olas mar adentro", explicó Jaime Alvarez Souto, responsable de Protección Civil de O Rosal.

Dos biólogos del CEMMA -Coordinadora para o Estudo dos Mamíferos Mariños- ,que se trasladaron al lugar, concluyeron que se trata d una ballena hembra común que llevaba unas 48 horas muerta. Los biólogos llevaron muestras del cetáceo para ser analizadas.

Hoy por la mañana se buscará la forma de retirar el animal de las rocas, si todavía permanece en el lugar, aunque será una tarea muy complicada "ya que por tierra no existe acceso posible", explicó Jaime Álvarez, y por mar habrá que estudiarlo.

Todavía no existen hipótesis de que pudo ocurrirle a este cetáceo. En el caso de Bueu, desde el Coordinadora para o Estudo dos Mamíferos Mariños (Cemma) apuntan que el fallecimiento se pudo deber a una colisión contra un barco. Una hipótesis que se fundamenta en que el cetáceo tenía la columna vertebral rota.