La presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, dejó claro ayer en Baiona que "foi a Diputación a que solventou o problema do campo do Aral" para que las instalaciones pudiesen abrirse para los entrenamientos y partidos de los doscientos jugadores del Erizana. El organismo envió un técnico de urgencia para recepcionar la obra en nombre del Concello porque este "tiña dificultades" para hacerlo y el asunto quedó resuelto "en 24 horas", según explicó durante un desayuno informativo para dar cuenta de las inversiones de la Administración provincial en la comarca a lo largo de los últimos tres años, que se aproximan a los 20 millones de euros.

Silva recalcó que la Diputación no podía recepcionar la obra, tal y como había solicitado el alcalde, Ángel Rodal, una semana antes por escrito porque "a instalación é municipal e non tempos competencias". El organismo provincial solo aportaba una subvención de 245.569 euros para pagar.

Aunque el terreno de juego llevaba un mes listo, el espacio deportivo no podía darse por finalizado oficialmente porque falta todavía la pista de atletismo alrededor. El Ayuntamiento carecía de técnicos que autorizasen la apertura provisional del campo sin rematar los trabajos y el alcalde recurrió entonces a la Diputación el pasado jueves, que accedió a colaborar enviando un funcionario que certificase la reapertura en representación municipal.

Inversiones en 3 años

En todo caso, "a Deputación tamén está para estas cousas", dijo Silva en su comparecencia, en la que recalcó que el de los últimos tres años "é o maior investimento da historia de Deputación nesta comarca", cuyos municipios percibieron 10,5 millones del Plan Concellos para afrontar 78 obras, más de 2,4 millones del Plan de Reequilibrio y el DepoRemse, 900.000 euros en otros proyectos y planes, 500.000 en empleo y formación, 900.000 en el área de Cohesión e Xuventude, 2 millones en proyectos de Mobilidade, 83.000 euros en Igualdade, 330.00 en Deportes, más de 500.000 en Cultura, más de 200.000 en Medio Ambiente, 40.000 en Novas Tecnoloxías, 160.000 euros en Turismo y 627.000 en la oficina del ORAL.