El Concello de Gondomar ahorrará en combustible y en contaminación al sustituir la caldera de gasoil de la casa consistorial por otra de biomasa. El departamento de Medio Ambiente ha logrado una subvención de 22.674 euros por parte de la Xunta para el cambio, que supondrá un coste de 814 euros a las arcas municipales. El Ejecutivo gallego ha otorgado además otra ayuda a la misma concejalía, que dirige el teniente de alcalde, Antonio Araúxo, para contratar por nueve meses y por menos de dos mil euros a una ingeniera técnica forestal, que se incorpora mañana.

Araúxo muestra su satisfacción por ambos logros, dado que la caldera de biomasa instalada en noviembre en la oficina de Urbanismo ha supuesto "un aforro moi importante, xa que con só 1.100 euros temos pellets para dous anos". La nueva técnica realizará tareas en relación con el tratamiento de la biomasa, la selvicultura o las plantas invasoras y podrá colaborar incluso con el marcado de franjas de protección forestal que la Xunta obliga a dejar libres de eucaliptos y pinos para proteger a la población de los incendios.