Una patrulla de la Guardia Civil de Gondomar detuvo esta madrugada a un joven vecino de la localidad de 25 años por un delito de violencia de género en plena calle y por daños al patrimonio público y privado.

En pleno enfrentamiento con su pareja, el chico reventó de una patada la puerta de acceso al Concello y, a pocos metros de allí, en la calle Rosalía de Castro, arrancó el retrovisor a un coche que etaba estacionado.

La alarma de la casa consistorial saltó pasadas las cuatro de la madrugada. Con solo un golpe de pierna, el arrestado logró hacer añicos la puerta, de cristal supuestamente semiblindado, según fuentes municipales.

La grabación de las cámaras de seguridad del Ayuntamiento permitió a los agentes identificar al autor de los hechos y procedieron a su detención. El gobierno municipal busca ahora una solución para dejar el consistorio cerrado esta noche y mañana mismo prevé reparar la puerta.

El arrestado, que presenta antecedentes por diversos delitos, se encuentra en el calabozo del Puesto Principal de la Guardia Civil Baiona-Nigrán y está previsto que mañana pase a disposición judicial.