Salceda de Caselas acogió ayer el acto inaugural del área recreativa de Rubás, obra en la que se aprovecharon elementos naturales existentes y que incluyó el acondicionamiento del terreno para facilitar la accesibilidad. Se construyó una senda peatonal desde la parte más alta, situada al norte, hasta llegar a la fuente. El entorno de la mina de Rubás se recuperó y además se dotó a la zona de un aparcamiento y de mobiliario urbano, además de canalización de aguas pluviales. La Diputación financió la obra con 45.169 euros del Plan Concellos.