A las 21 diputadas y 6 senadoras que accedieron a las cámaras españolas en la primera legislatura se las conoce como "Las constituyentes", título del documental que el Concello de Baiona ofrece hoy en el Museo de la Navegación de Baiona a las 19.00 con motivo del Día Internacional de la Mujer. Entre ellas, estaba la ferrolana Nona Inés Vilariño Salgado, que ofrecerá una charla tras la proyección.

-Fueron ustedes pioneras y garantes del artículo 14 de la Constitución, el que habla de la igualdad, tan reivindicada un día como hoy.

-El artículo 14, descontextualizado, es tan obvio, tan lógico, que no se le da importancia. Realmente no éramos conscientes de la trascendencia que tenía en aquel momento.

-¿Se respeta hoy en día?

-Hay vulneraciones flagrantes como la diferencia salarial.

-Nos queda mucho por lograr.

-Todavía hay muchas mujeres con esos corsés que nos quieren poner, como la familia en sentido amplio, algunos visibles y otros invisibles. Pero la lucha por los derechos de la mujer no es posible sin incorporar a los hombres. Yo siempre le decía al presidente Suárez que no cometiese el error de crear una Dirección General de Igualdad compuesta solo por mujeres.

-¿Apoya la huelga feminista?

-Todo lo que se haga por visibilizar la situación me parece bien, pero yo convocaría también a los hombres. Tendríamos que salir todos a la calle, porque todos debemos tener los mismos derechos. A mí me parece que cualquiera que opte por dedicar unos años a su familia, sea hombre o mujer, debe tener su derecho. No hay que demonizar los tacones, el tener hijos, etc... sino reivindicarlos.

-Cuando usted accedió la Congreso eran 21 diputadas, hoy son 138, pero ningún partido mayoritario ha apostado por una candidata a la presidencia del Gobierno.

-Los hombres nos dejan llegar hasta una frontera, nos promocionan y se ponen unos cupos... Pero a la hora de la verdad, en los puestos ejecutivos somos minoría. Hay que seguir luchando. A mí lo que me gusta es trabajar porque las decisiones de los hombres y mujeres sean fruto de la igualdad de oportunidades, que muchas veces está ausente en ciertas políticas y actitudes y en los genes de la violencia de género, que es nuestra gran lacra.

-¿Tiene solución la violencia machista?

-La tiene, pero tenemos que encontrarla. Creo que las mujeres tenemos que recibir información sobre la inteligencia emocional y el grado de dependencia que podemos tener sin darnos cuenta. Habría que trabajarlo muchísimo desde la psicología. La cuestión es lograr la verdadera libertad de la mujer, cultural y económicamente, para que pueda tomar sus propias decisiones.