Los marineros de la Cofradía de Pescadores "San Juan" de Redondela iniciaron ayer la campaña de choco, que se alargará hasta el próximo 30 de junio, y en la que participan unas cuarenta embarcaciones. Sin embargo, las malas condiciones meteorológicas y la recuperación de los precios de la almeja provocaron que tan solo cinco barcos salieran ayer a la pesca del cefalópodo, por lo que la primera jornada registró una discreta subasta, con tan solo 60,5 kilos de esta especie.
Los precios, sin embargo, fueron muy buenos por la escasez de producto y su elevada calidad. El choco pequeño se despachó a 10,65 euros, mientras que el grande se quedó en 8,05. Una cotización muy superior a la media lograda el pasado año, de 6,5 euros, una tarifa que fue calificada desde el pósito como muy buena.
El patrón mayor, Clemente Bastos, restó importancia a estos precios que considera "algo puntual" por tratarse de la primera jornada y por la falta de producto, yuna circunstancia que confía en superar a partir de la próxima semana cuando se sumen más barcos a este arte. Las capturas medias en la cofradía redondelana, una vez estén trabajando toda la flota, suele rondar entre los 400 y 600 kilos diarios, y en días buenos se han llegado a subastar hasta 1.000 kilos.
Respecto a las previsiones de la nueva temporada, Bastos se muestra cauto a la hora de hacer previsiones. "Es muy difícil hacer una previsión y depende mucho del tiempo. Hasta ahora este invierno tan seco y sin temporales no fue muy bueno porque los chocos no entraron a desovar, aunque parece que en los últimos días esta tendencia está cambiando y la cosa puede mejorar, aunque el balance tendremos que hacerlo al final. Aún es muy pronto", señala.
