Augas de Galicia continúa los trámites para presentar una reclamación judicial contra el Concello de Gondomar por las pérdidas de subvenciones generadas al paralizar la polémica obra del bombeo en pleno centro urbano para completar el saneamiento. El departamento de la Consellería de Medio Ambiente e Ordenación do Territorio prevé exigir al Ayuntamiento más de dos millones de euros en caso de no poder culminar las obras este año, lo que parece probable ante el rechazo frontal del gobierno municipal al proyecto en respuesta a la presión social.
En cualquier caso, Augas plantea un nuevo ultimátum al Concello. Si continúa en su postura e impide las obras, le reclamará los 1,1 millones de la subvención perdida de la UE, más los 900.000 euros ya abonados por los trabajos realizados, que Europa descertificaría en enero de 2017, más las reclamaciones del contratista. Si cambia de opinión y admite la continuación del proyecto para rematarlo a lo largo de este ejercicio, le exigirá tan solo los 1,1 millones de la ayuda abortada.
El organismo insiste en que es decisión del Ayuntamiento determinar si se enfrenta a una reclamación patrimonial mayor o colabora para evitar que los daños vayan a más. En cualquier caso, lo que más lamenta la Xunta, señalan fuentes de Augas, es que "a día de hoxe, o saneamento de Gondomar segue sendo unha asignatura pendente, co dano medioambiental que conleva para o río Miñor".
