Los ponteareanos del casco urbano y de varias parroquias ya pueden consumir el agua que reciben en los grifos de sus casas con tranquilidad. Al entrar en funcionamiento la nueva estación de tratamiento de agua potable (ETAP) de Ponteareas, ubicada en A Xesta, más de 13.000 vecinos dejan de sufrir las malas condiciones del agua, turbia en algunas épocas del año.

Según aseguró ayer el conselleiro de Medio Ambiente, Agustín Hernández, durante la inauguración de esta estación potabilizadora, con ella "se soluciona una insuficiencia histórica de Ponteareas" y garantizó que el agua al ser tratada "carece de color y sabor, además de ser perfectamente apta para el consumo" .

Subsanar las deficiencias de la calidad del agua de Ponteareas ha sido posible gracias a varias mejoras que incluye esta ETAP financiada con 1,3 millones de euros. Una línea de agua con medidor y regulador de cloro, de turbidez del agua bruta y de nivel de PH. Además dispone de equipos de decantación, filtración y desinfección.

Hasta ahora en A Xesta existía un depósito regulador de 2.000 metros cúbicos y se ha construido un segundo depósito de agua tratada de la misma capacidad. También se acondicionó la captación en el río Tea, en A Freixa, desde la que se bombea auga a los depósitos existentes en A Xesta y en A Freixa, de 200 metros cúbicos.

En su visita a Ponteareas, Hernández también recordó los 1,3 millones invertidos en la última fase del saneamiento de Areas, Arnoso y Xinzo, unas obras que se encuentran al 80% de ejecución y centradas actualmente en la construcción de conducciones y tres estaciones de bombeo.

En esta visita acompañaron a Hernández concejales del gobierno local y el alcalde, así como representantes del resto de la corporación, el delegado de la Xunta, José Manuel Cores Tourís; el diputado autonómico, el socialista Luis Piña, así como técnicos de la empresa Aquagest.

Previamente, el conselleiro de Medio Ambiente supervisó e inauguró la estación depuradura de aguas residuales (EDAR) de A Cañiza. Esta infraestructura que da servicio a 4.000 habitantes está en funcionamiento tras ser concluida en abril. Financiada con 2,5 millones, trata las aguas residuales desde A Cañiza y Os Boeixos y también las procedentes del matadero municipal.

El PSOE de A Cañiza critica que fuese el exalcalde, César Mera, quien descubriese la placa de inauguración tras haber sido "el principal responsable político de la contaminación del río Deva".