El protocolo de la Xunta establece un kilómetro y medio de tala de coníferas desde el foco de infección de la plaga del pino, en Taboexa-As Neves, por la aparición del Bursaphelenchus xylophilus donde se realizará una corta, pero los afectados desconocen cuales son límites en parcelas de esa área y exigen conocerlo.

Además los vecinos afectados, más de medio millar, también exigen saber cuánto les pagarán por la madera que se cortará y cuál será el alcance de las subvenciones que se percibirán para la repoblación posterior. En las reuniones celebradas el fin de semana en As Neves y Salvaterra, los técnicos de la Xunta no respondieron a esas preguntas, que son las que preocupan a la colectividad, y solo se limitaron a explicar cual es el protocolo que se pone en marcha, como ya habían hecho con el sector de la madera y con los alcaldes.

El regidor local de Salvaterra, Arturo Grandal, afirmó ayer que por parte de la Xunta, en fecha breve, habrá una nueva reunión en la que se responderán las preguntas de los vecinos y se conocerán las medidas concretas a tomar y las fechas.

Honda preocupación

Por otra parte, el BNG de la comarca del Condado envió un comunicado en el que indica que la confirmación oficial de este caso positivo suscita "honda preocupación" en una comarca como la del Condado con una importante superficie dedicada a la producción forestal.

El NMP, como se conoce al Bursaphelenchus xylophilus, está considerado a nivel mundial como uno de los organismos patógenos más peligrosos para las coníferas especialmente para los pinos, ya que los seca en pocas semanas y pasa de árbol a otro a gran velocidad.

Los nacionalistas señalan que una vez que la sospecha de la plaga se detectó en el laboratorio de Areeiro (Pontevedra) en los primeros días de octubre con el primer resultado positivo y que la confirmación fue comunicada por el laboratorio de referencia el 5 de noviembre, "se aprecia" –según el BNG– "un importante retraso en la información ya que, esta sale la luz pública en el DOG del 26 de noviembre". "Los nacionalistas denunciamos el retraso y la escasa información que la Xunta proporciona sobre este gravísimo problema a la población del rural y específicamente al sector productor y transformador de la madera. Más grave es que no haya aprobado un plan de acción con medidas concretas", afirma Francisco Chivite, responsable comarcal del Bloque.