El Celta Zorka está a un paso de lograr la clasificación para el partido que decidirá uno de los ascensos a la máxima categoría tras la importante victoria de ayer ante el equipo anfitrión. En la última jornada de la fase previa, que se disputa esta tarde (19.15 horas), una victoria de las viguesas las clasificaría como campeonas del grupo y se cruzaría en el partido decisivo seguramente con el ISE CB Almería -se juega la primera plaza con un Campus Promete que está arrasando en el otro grupo-. Una derrota implicaría sacar la calculadora, siempre y cuando el Ciudad de Los Adelantados derrote al Barça (21.15 horas). En el triple empate entrarían en juego las diferencias de puntos. El Celta puede perder de hasta 11 -si es de 12 existen dudas y se consultaría a la Federación Española, de más implica eliminación-.

Si en la primera jornada el equipo salía reforzado tras la victoria en la prórroga ante el Barça, la de ayer sirvió para convencer a las jugadoras más incrédulas que el ascenso es posible. Es difícil ponerle pegas al partido; de sacar alguna podría ser el poco acierto desde la línea de tiro libres (64%).

El Celta Zorka realizó ayer, sin lugar a dudas, el mejor partido defensivo de la temporada. El conjunto canario era un rival peligroso, pues seis de sus diez jugadoras son extranjeras. La igualdad en el marcador únicamente duró los primeros diez minutos de juego. Las canarias tomaron un poco de ventaja gracias a su acierto en los lanzamientos triples.

Sin embargo la situación cambió en el segundo cuarto. El Celta Zorka ajustó la defensa e incrementó la presión, obligando al Ciudad de los Adelantados a jugar exterior al ser incapaz de meter balones a la zona, donde Raquel Carrera y Elo Edeferioka fueron inexpugnables durante todo el encuentro. De hecho, el cuadro canario tardó cinco minutos en lograr la primera canasta del cuarto y fue desde la línea de tiros libres. Anne Senosiain logró la canasta que ponía definitivamente al Celta Zorka por delante en el marcador, aunque no era capaz de abrir brecha. No obstante, el equipo se fue al descanso con un punto de ventaja.

La decoración cambió radicalmente tras el paso por el vestuario. El Celta Zorka mantenía la intensidad defensiva, consiguiendo bloquear a un conjunto canario que forzaba casi todas sus acciones en ataque, teniendo que hacer tiros forzados en el mejor de los casos. De hecho, si en el segundo cuarto tardó cinco minutos en anotar su primera canasta, en el tercer cuarto tardó seis minutos. Tiempo que fue aprovechado por el cuadro céltico para incrementar la diferencia hasta superar los diez puntos a dos minutos para finalizar el cuarto. El Celta Zorka estaba haciendo un gran partido, sin debilitarse incluso en las rotaciones para dosificar a las jugadoras de cara a los diez minutos finales.

El cuadro celeste no bajó la intensidad en los diez últimos minutos, pero además supo jugar con la ansiedad de las canarias, que se veían incapaces de darle la vuelta a la situación. En ataque no podían correr al no ser capaces de sacar el balón con velocidad, finalizando muchas de las jugadas con lanzamientos forzados que por fortuna para las viguesas no veían aro.

Hoy será una tarde importante para el celtismo con el doble enfrentamiento con el Leganés, tanto en fútbol como en baloncesto, con la final como meta en tierras tinerfeñas.