El Celta de Vigo ha pedido a la Liga de Fútbol Profesional (LFP) la suspensión del partido que mañana tendría que disputar contra el Atlético de Madrid debido al cierre de la grada de Río por "falta de seguridad".

Una petición que ha sido rechazada por la patronal del fútbol español, lo que motivó que la directiva del Celta le ofreciese al Atlético de Madrid jugar el partido de este domingo en el Wanda Metropolitano y el de la segunda vuelta en Balaídos, lo cual tampoco ha aceptado el conjunto rojiblanco, informaron a Efe fuentes del club gallego.

La grada, probablemente lista para el partido del Athletic

El Ayuntamiento de Vigo, propietario del estadio de Balaídos, anunció anoche que la grada de Río -donde el Celta tiene alrededor de 7.500 abonados- permanecerá cerrada "por falta de seguridad" durante el Celta-Atlético de mañana domingo. "Respecto de la situación de la cubierta de la grada de Río, una vez bajada la estructura y sometidas las esferas en las que se encajan las barras a las pruebas pertinentes, los ingenieros de la dirección de obra confirman que no se puede garantizar la seguridad en esa grada durante el partido del domingo", explica el ayuntamiento en su comunicado.

El alcalde de la ciudad olívica, Abel Caballero, precisaba esta mañana el problema técnico que había llevado a los técnicos de la obra de Balaídos a tomar la decisión del cierre de la grada. El error no es imputable al Celta, ni al Concello ni a la adjudicararia, sino a una de las empresas que participan en esta obra colosal", apunta el regidor vigués. Asimismo, apuntaba que la reapertura de Río se producirá el 5 de noviembre, para el encuentro que disputará el equipo de Unzué contra el Athletic de Bilbao.

Devolución de entradas

Respecto al reembolso de las entradas, tanto el club como el alcalde de Vigo han asegurado que se realizará la devolución del importe de las mismas así como el descuento proporcional a los abonados del Celta afectados. En la grada se pueden sentar hasta 7.000 personas.

En un comunicado y a través de un vídeo publicado en la web y redes sociales del club vigués, Carlos Mouriño ha pedido disculpas a los aficionados por las molestias causadas y ha anunciado que el próximo martes se explicará cómo se realizará la devolución de las entradas del partido de mañana. En ese mismo mensaje, el club ha dejado claro que el cierre de la grada de Río "no es responsabilidad del Celta".