Los jugadores del Celta dieron rienda suelta tras el partido a la alegría que supone haber igualado ayer en Rusia frente al Krasnodar el techo histórico del club en una competición europea diez años después de la última participación del equipo celeste en el continente. Los autores de los goles, Iago Aspas y Hugo Mallo, el defensa central Gustavo Cabral y el centrocampista Pablo Hernández celebraron tras el choque el nuevo hito histórico conseguido por el grupo de Berizzo.

"Con el 2-1 de la idea sabíamos que iba a a ser un partido difícil porque sabíamos que con su gente apretaban mucho", indicó el delantero moañés, que destacó la madurez del equipo para leer las necesidades del choque. "Hemos hecho un buen partido, siempre hemos sabido lo que teníamos que hacer. El gol en el minuto 51 nos dio alas y luego pudimos matar el partido a la contra" añadió Aspas en declaraciones a beIN Sports.

"Estoy feliz, el vestuario está feliz. Vinimos a hacer un buen partido y lo hemos hecho. Hemos sido pacientes y pudimos convertir, que es lo que esperábamos", apuntó Gustavo Cabral, que precisó: "El gol de Hugo nos dio todo, luego tuvimos que retroceder porque el rival dispuso también de algunas ocasiones, pero al final nos vamos con un 0-2 que nos permite pasar de ronda", señaló. El autor del primer gol, Hugo Mallo, dijo por su parte: "En el momento del gol me acordé de todo el mundo, de la gente que se quedó en Vigo y de la gente que está trabajando con nosotros y que no se ve".

Pablo Hernández, mientras, no manifestó preferencias por el rival que pueda tocar en suerte en cuartos de final: "Cualquier rival que nos toque será duro, pero toque el que toque intentaremos seguir por esta senda".