La calidad de los proyectos presentados y la excelencia en su diseño fueron la calificación general de todas las embarcaciones y coches solares que este sábado tomaron parte en la IV edición de la Regata Solar que organiza Marine Instruments, con el patrocinio del Concello de Baiona y la colaboración de Coca Cola, Gadis y Tuypan.
Aun cuando la previsión meteorológica no era la más deseada, finalmente los prototipos pudieron navegar en la playa de la Ribera y deslizarse por las pistas de las canchas de balonceso, propulsados por las placas solares que la organización les había facilitado, aprovechando los rayos solares que se colaban por las nubes altas que poblaban el cielo. En igualdad de condiciones se echaron al agua, siguiendo las indicaciones del procedimiento de salida, para trazar rumbos de navegación entre las boyas fondeadas en la propia ensenada o seguir el circuito montado sobre las pistas rojas del Paseo de La Palma.
El colegio Maristas se llevó los dos primeros premios a la Eficencia, en el grupo de ESO y BAC. El premio al Diseño fue para el Colegio Barreiro. En los Grados de la Formación Profesional la Eficiencia fue para el IES Rodeira de Cangas, y el del Diseño para el Hogar Afundación.
Respecto a los coches solares, el primer premio fue para el Open 10-P0 y el segundo puesto para un habitual del concurso de Marine Instruments, el Apóstol Santiago de Vigo. De los premios se encargaron el Alcalde de Baiona, Carlos Gómez, y el Socio-Director de Marine Instruments, Francisco Pino.
Una vez echado el broche a esta cuarta edición, Marine Instruments ha comenzado a trabajar en la de 2020, incrementando su dedicación a un evento que consideran imprescindible entre sus actividades tecnológicas y científicas, consolidando la Regata Solar y promoviendo la nueva categoría de coches solares y que spoone también una nueva manera de navegar por la ría viguesa.
La innovación, una nueva fórmula deportiva
- Buscar nuevas fórmulas para el deporte es algo que se ha convertido en muy importante en la actualidad. Queda visible en la regata que se organizó en Baiona y que contó con una alta participación. Tanta que es casi seguro que en la próxima edición aumente de forma considerable. Abrir nuevos campos se ha convertido ya en algo habitual, también en los deportes náuticos. La experiencia en Baiona demuestra que este es un camino a seguir.